Y encima nos quieren enganchar más

La realización de la Copa del Mundo de fútbol, cada cuatro años, atrapa la atención de gran parte de la población mundial. Pese a ello, los organizadores se las ingenian para asegurar –aún más- que la cantidad de televidentes sea mayor cada vez. Una de las últimas estrategias, que asumo fue diseñada por la FIFA, es la de prohibir la colocación del cronómetro en las transmisiones de los partidos del Mundial.

Así es. Si ustedes han visto alguno de los partidos de Alemania 2006 –en Perú a través de ATV- se darán cuenta que la señal oficial de la FIFA solo pone el cronómetro cada 15 minutos. De esa manera, quien esté interesado en el partido ya no podrá dar una miradita, sino que se quedará enganchado hasta saber en qué minuto va el juego y, si tiene suerte, saber también cuál es el marcador.

Hace algunos días, se difundió la noticia en la que se preveía que unos 1.500 millones de personas seguirán el Mundial por TV. Ahora, imagínense cuánto cobrarán los organizadores (y las estaciones que retransmitan los partidos) a las empresas por algunos segundos de publicidad, sin contar lo que habrán cobrado por la publicidad en los estadios y material oficial.

No queda duda que cada vez más el juego queda de lado y lo que manda es el dinero.

Foto: Captura de TV, ATV
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